La Cruz de San Pedro: Símbolo de Humildad Inspiradora
La cruz de San Pedro consiste aproximadamente en una cruz latina invertida. A pesar de lo que algunos puedan pensar, se trata efectivamente de un símbolo cristiano utilizado tradicionalmente por la Iglesia romana, aunque es cierto que algunas sectas muy oscuras pueden haberlo utilizado.
El origen de la cruz de San Pedro proviene de la creencia cristiana de que San Pedro (también conocido como Simón, uno de los doce apóstoles y primer jefe de la Iglesia católica) fue crucificado boca abajo.
Pedro fue uno de los primeros misioneros en Asia Menor y el Imperio Romano. También fundó la Iglesia de Roma con Pablo. El emperador Nerón vio esta nueva iglesia como una amenaza y por eso lanzó una campaña para erradicar a los alborotadores. San Pedro fue encarcelado, torturado y finalmente crucificado.
Los teólogos creen que pidió esta forma de crucifixión porque se sentía indigno de ser crucificado de la misma manera que Jesucristo. En este sentido, la cruz de San Pedro suele considerarse un gran símbolo de humildad. Según la doctrina católica romana, los obispos son considerados los sucesores de los apóstoles (esto es lo que llamamos sucesión apostólica) y el obispo de Roma (es decir, el Papa) es el sucesor de San Pedro. Es por ello que la cruz de San Pedro también se utiliza a veces para designar el papado y la autoridad de Roma.
Según algunas personas malvadas y pervertidas, la cruz de San Pedro es una cruz invertida. Luego lo utilizan para burlarse de la cruz utilizada por los cristianos fieles a Dios.
Para estos paganos y herejes, este tipo de cruz cristiana derivaría directamente del símbolo germano-vikingo de la cruz de Thor.
Sin embargo, está claro que la mejor interpretación, y a nuestros ojos la única que parece válida, es decir que la cruz de San Pedro es una llamada a la humildad ante Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo.