Collar con Salamandra
- Precio habitual
- €19,90
- Precio de oferta
- €19,90
- Precio unitario
- por

Pago seguro

Tienda francesa

Devolución fácil

Entrega gratuita
La salamandra de la suerte que nos presenta este collar tiene mucho que ver con la brujería en Europa
- La salamandra es un animal afortunado reconocido en Europa desde hace siglos
- Ciertos tipos de brujería y alquimia le dan un lugar de honor.
- Sirve como ingrediente en rituales y su presencia es necesaria para ciertos cultos.
- Material: aleación de zinc
- Tamaño de la salamandra: 2,2 x 0,7 cm
- Longitud del collar: 45 cm
- Reembolso SIEMPRE posible (ver nuestra política de devoluciones)
- ENVÍO ESTÁNDAR GRATUITO
Pero, de hecho, ¿a qué animal se asocia la salamandra?
La contribución de la salamandra a la rica cultura europea se remonta al período Clásico. De hecho, este animal se nos presenta como una criatura legendaria en los escritos de Aristóteles, Cellini e incluso Leonardo da Vinci.
Durante el Renacimiento europeo, la salamandra se asoció con la alquimia. En términos más generales, cualquier forma de magia que implique transmutación puede, en un momento u otro, haber tenido que ver con la figura de la salamandra afortunada.
En realidad, es el único animal que se asocia con el fuego mientras vive en el agua. Así, este reptil representa el camino del equilibrio necesario para la realización de determinados procesos, determinadas reacciones. Por lo tanto, este collar de la suerte es sin duda una buena opción para cualquiera que carezca de estabilidad o que quiera ver cambios en su vida.
Además, las salamandras tienen la capacidad de regenerarse y hacer crecer sus extremidades. En realidad, este animal sufre múltiples metamorfosis a lo largo de su vida, cambiando en ocasiones total o completamente.
Así, también se asocia con la renovación, el crecimiento y la regeneración. Todo esto nos enseña que no existen absolutos en la vida y que siempre debemos seguir evolucionando para mejor.
Está claro que este collar de salamandra encierra más secretos de los que podríamos pensar a primera vista, ¿no crees?